viernes, 25 de junio de 2010

Pan diario :SALMO 4: 7


Tu diste alegría a mi corazón

mayor que la de ellos cuando abundaban

su grano y su mosto.


La gente siempre busca un estado de felicidad, pero no busca el bien supremo; generalmente se corre tras la felicidad, externa y temporal, que puede brindar la posesión de bienes, pero el alma queda sin fruto. El encontrar a Dios, y esto conlleva la felicidad, no tiene para el salmista comparación alguna. David era rey, y por lo tanto, poseedor de lujos quizá inalcanzables para nosotros, sin embargo, él tenía como bien supremo la alegría que le representaba conocer a su Dios. Y, aunque se encontraba perseguido, podía decir que:

En paz me acostaré y asimismo dormiré,

porque solo Tu, Jehová, me haces vivir confiado. (v. 8)

¡Cuánta paz hay en sus palabras! Solo la persona que deposita toda su confianza en Dios puede, no solamente vivir confiado sino también dormir, que es muy importante en estos tiempos que corren. Aquel que conoce a Dios experimenta un gozo que no se puede describir con palabras, no es algo temporal sino permanente. Si aún no lo has experimentado, te invito; busca a Dios de todo tu corazón, pídele perdón y el tambíen colocará este gozo inefable en tí.

Bendiciones

RONI

jueves, 24 de junio de 2010

MATEO 24:12-13


Y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará.
Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo.


¡Cuánto se ha multiplicado la maldad,

cuánto se ha multiplicado!

Los ojos se han vuelto altivos, las miradas frías,

y el amor se nos ha escapado.

Ya no hay manos extendidas, no las hay,

cada uno por lo suyo mira;

Corazones heridos, que congoja llevan

y los rostros abatidos se muestran.

La palabra es dura, la respuesta es fiera,

y cual armas están siempre dispuestas;

encienden fuegos, provocan guerras,

ya no hay gozo,no, solo peleas.

Nadie tiene cordura, nadie su boca cierra,

ya no se pasa por alto la ofensa.

La Maldad ha salido a buscar quien la siga

y de sus aguas profundas beba,

se agazapa, expenctante, mira y elege,

y caza el alma del incauto,

y lo arrastra hasta las mismas tinieblas.

¡Cuánto le cuesta al hombre volver de allí,

cuánto le cuesta!

No hay quien busque a Dios, no lo hay,

sus ojos recorren toda la tierra.

Busca un corazón que persevere, que ame

y no lo encuentra.

¡Qué no se enfríe el amor, que no se escape!

y se aparte cual ave en busca de otras tierras

Que puedas hallar en mi un corazón, oh Dios

dispuesto y amante, hasta que vuelvas!

RONI




miércoles, 23 de junio de 2010

Pan Diario:SALMO 71: 19-21


Y tu justicia, oh Dios, hasta lo excelso,

Tú has hecho grandes cosas,

oh Dios, ¿quién como Tú?

Tú, que me has hecho ver muchas angustias y males,

volverás a darme vida.

y de nuevo me levantarás de los abismos de la tierra;

aumentarás mi grandeza,

y volverás a consolarme.


¡Cuánto consuelo podemos encontrar en las palabras de este salmo! En muchas ocasiones, en el paso de nuestra vida por el escenario de este mundo, nos ha tocado llegar hasta el fondo, casi, diría yo, hasta el borde del abismo. Y es en ese momento, cuando pensamos que estamos solos y olvidados, arrinconados a punto de sucumbir, cuando llega a nuestros oídos, con un susurro desalentador, las palabras ¿dónde está tu Dios? ¿Por qué te hace pasar por esta situación en la que estás? Esas palabras pueden hacer simbronar los cimientos de nuestra fe, pero confiemos, Dios sigue allí, a nuestro lado. El no prometió que nuestro caminar sería de rosas, sino que estaría con nosotros siempre, en lo bueno, pero también en lo malo. El cristiano atraviesa por muchas dificultades a lo largo de su peregrinar por el mundo, pero podemos estar seguros que nada ni nadie nos hará daño, y que saldremos victoriosos de la prueba, con una fe purificada y un cántico de alabanza en nuestra boca. El Señor fortalezca cada día nuestra fe y no nos olvidemos que:


Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo;

y si por los ríos, no te anegarán.

Cuando pases por el fuego, no te quemarás,

ni la llama arderá en ti.

Isaías. 43:2

Bendiciones

RONI

martes, 22 de junio de 2010

Pan diario: PROVERBIOS 1: 7


El principio de la sabiduría es el temor de Jehová,
Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.


El rey Salomón fue la persona mas sabia que habitó sobre la tierra, y esto dicho por boca de Dios( 1 Re. 4:29-31). Tanto a traves de los Proverbios como en el resumen de Eclesiastés (Ecl. 12:13) expresa que el temor de Jehová es la clave para la adquisición de la sabiduria y que esto es el fin de todo hombre.

Ahora bien, ¿qué significa "el temor de Jehová"? ¿Es, tal vez, la imagen de un Dios permanentemente airado, capaz de aplastarnos contra el suelo, como si fueramos insectos; ante cuyos ojos la vida del hombre es despreciada y aún deseada su muerte y aniquilación? El mismo libro de Proverbios nos da la luz para poder entender a qué nos referimos cuando hablamos del temor de Jehová: Proverbios 8:13 nos dice:

"El temor de Jehová es aborrecer el mal,

la soberbia, la arrogancia, el mal camino,

y la boca perversa, aborrezco."

Cuando yo comienzo a aborrecer lo mismo que Dios aborrece, comienzo a ser sabio; ¿ y cómo se qué es lo que Dios aborrece? Debo buscarlo en su Palabra, allí esta todo el pensamiento de Dios. Cuando comienzo a poner por obra lo que Dios me dice en su Palabra, comienzo a alejarme del mal camino y comienzo a pensar como Dios piensa, a ver las cosas como Dios las ve, mi mente comienza a adquirir sabiduría.

Cuando amamos la sabiduría que viene por el temor de Jehová, tenemos sobre nuestras sienes una corona de hermosura y Dios nos honrará. (Pr. 4:8.-9). Bendiciones.

RONI

lunes, 21 de junio de 2010

Enseñanza semanal: LUCAS 8:25


Y El les dijo:¿Dónde está vuestra fe? Y atemorizados , se maravillaban, y se decían uno a otros: ¿Quén es éste, que aún a los vientos y a las aguas manda y le obedecen?


Es fácil parecer hombres de fe cuando se nos manda caminar en terreno conocido. En este pasaje, los discípulos son probados y esta prueba produce en ellos crecimiento en fe a pesar de las circunstancias. Y ¿por qué? porque en este caso, las circunstancias eran conocidas: el mar, la barca y aún la tormenta. Pero el Señor quiere que nuestra fe siempre esté puesta en El y no en nosotros.



  1. La fe debe estar puesta en la palabra de Dios: es evidente que los discípulos escucharon lo que Jesús había dicho, de lo contrario, no hubiesen subido a la barca; pero ellos depositaron la fe en sus capacidades: ellos eran hombres de mar, pescadores experimentados, toda su vida pescaron en ese lugar, cuántas tormentas habrían pasado, cuántas veces habrán dicho: pasemos al otro lado; y cuántas veces nosotros somos como ellos, sintiéndonos seguros, porque el terreno que pisamos nos es familiar y cuánto peligro hay en sentirnos autosuficientes e independientes.


  2. Las circunstancias de la vida generalmente son las llamas que calientan el crisol: dice el apóstol Pedro que es necesaria la prueba de la fe (1 Pe. 1:6-7), estemos seguros que si decidimos caminar en fe, las pruebas van a venir y harán dificultoso nuestro caminar. Para los discípulos, esa tormenta que se levantó en el lago iba a probar dónde estaba depositada su fe; si ellos hubiesen puesto su confianza en las palabras de Jesús, nunca habrían llegado a la desesperanza. Y esto es para nuestra vida también: si Dios nos dio una palabra, El la va a cumplir.


  3. Cuando la fe no está depositada en la Palabra de Dios, puede peligrar: cuando está puesta en lo que yo puedo hacer o me creo capaz de hacer, puedo tener la misma mirada que tenían los discípulos: ellos creían que perecían, porque no habían podido dominar la situación. Es mas, ya se habían dado por muertos. Pero lo peor es responsabilizar al Señor: ¿no tienes cuidado, que perecemos?(Mr 4:38) y qué respuesta recibieron: ¿DONDE ESTÁ VUESTRA FE?

Y hoy, como ayer a los atemorizados discípulos, Jesús te pregunta: ¿Dónde está vuestra fe? ¿confían en mí en toda circunstancia?


Fíate de Jehová de todo tu corazón,


y no te apoyes en tu propia prudencia.


Reconócelo en todos tus caminos,


y El enderezará tus veredas


Proverbios 3:5-6


Bendiciones


RONI

domingo, 20 de junio de 2010


Pan diario:PROVERBIOS 4:1


Oíd, hijos, la enseñanza de un padre,

y estad atentos, para que conozcáis cordura.


En muchas ocasiones, a los hijos les es molesto escuchar o prestar oído a la experiencia de los padres, quizás porque creen que tienen el derecho a tener la suya propia o a vivir su vida como les plazca, y a partir de allí, hacen oídos sordos a cualquier recomendación que venga de parte de ellos.

Pero Dios, en su Palabra, nos aconseja, que prestemos atención a la enseñanza que nos brindan nuestros padres y que ésta, de ningún modo, debe ser considerada una carga molesta que se obliga a llevar, sino que será algo que nos beneficie, será una forma de aumentar nuestro conocimiento, una joya que hermosee nuestra sien.

Dios puso adelante a los padres para que marquen el camino por donde sus hijos deben andar, para que no se extravíen. Que el Señor nos ayude a ser buenos guías de nuestros hijos y podamos llevarlos siempre por el camino que El nos marcó.


FELIZ DÍA A TODOS LOS PAPÁS. Blow Kiss

BENDICIONES.





sábado, 19 de junio de 2010

Pan diario: PROVERBIOS 27:1


No te jactes del día de mañana;

porque no sabes qué dará de sí el día.


Son muchas las veces que nos expresamos hablando de lo que haremos el día de mañana, dando, muchas veces, las cosas por hechas. Planificamos nuestra vida con total confianza de que todo va a producirse tal y como lo pensamos.

Pero muchas, muchas veces, las cosas no salen exactamente así como estaban previstas, y nos llama la atención, porque no estamos preparados, me hago cargo, de sobrellevar lo que no estaba planificado, lo circunstancial, lo emergente. Y nos quedamos lamentándonos por el tiempo perdido, mirando lo que podía haber sido y no fue como queríamos que fuera.

Nos ahorraría mucha frustración el dejar todo en manos de Dios, es difícil porque, como hombres, queremos ser siempre los que manejamos el timón y nos cuesta muchísimo dejar el mando de nuestra vida en manos del Señor. Quizás porque todo lo medimos en pensamiento de adulto, en que a mayor edad mayor responsabilidad, pero en nuestra relación con el Señor, ésto debería ser: cuánto mas madura sea nuestra relación con Dios, mas dependiente. Suena ilógico, pero es el pensamiento de Dios. Dios no quiere que crezcamos y nos independicemos, como hacen los hijos, sino que cada día El sea el que dirija todo ámbito de nuestra vida, que no nos reservemos nada para nosotros, El quiere ser nuestro todo en todos.

Aprendamos hoy a dejar nuestro mañana en las manos de Dios, y no nos jactemos de lo que no depende de nosotros. Alabemos al Señor en todo. Bendiciones

viernes, 18 de junio de 2010


Un pájaro
Acrilico sobre lienzo

Orquídeas

Pepe Biondi

ALGUNAS DE MIS PINTURAS
Flores azules. Sobre raso

Pan diari: HABACUC 2:4


He aqui, aquel cuya alma no es recta, se enorgullece,

mas el justo por su fe vivirá.


¡Cuán tremendas palabras recibe el profeta Habacuc, como respuesta a su demanda, de parte de Dios! Estaba recibiendo la confirmación de la invasión de los babilonios a Judá, luego de que él había planteado a Dios todo lo que estaba pasando; la mirada del profeta sobre la iniquidad y maldad de su pueblo, lo estaba abrumando, y le impedía levantar su vista de la tierra, se le había nublado la visión. Y muchas veces nosotros estamos atravesando el mismo valle, con las mismas penas y el mismo e intenso dolor.

Pero Dios le prodiga estas palabras de esperanza: "El justo por su fe vivirá", invitándolo a levantar su mirada de las circunstancias y poner su fe en El; no le dice que va a cambiar nada de lo que está determinado ya que pasaría, sólo que el que cree, salvará su vida. Habacuc vuelve su mirada al cielo, ha pasado del temor a la fe, del desaliento a la esperanza, del valle de sombras a la cima del collado.

Aprendamos hoy de Habacuc a no dejarnos abrumar por lo que sucede a nuestro alrededor y a descubrir que en Dios está la solución de todos nuestros problemas. Dejemos la queja y aprendamos a depender de El por la fe. Bendiciones

jueves, 17 de junio de 2010

Pan diario: LUCAS 11-1


Aconteció que estaba Jesús orando en un lugar, y cuando terminó

uno de sus discípulos le dijo: Señor, enséñanos a orar, como también

Juan enseñó a sus discípulos.


Cuando yo era chica, una de las primeras enseñanzas que recibí fue esta: Orar es hablar con Dios. Grande era mi sorpresa, pues lo único que conocía eran repeticiones, algún Padrenuestro medio incompleto, pero me encontré con esta nueva relación con Dios, a Dios se le podía hablar, como cuando uno está hablando con su compañero, con su amigo, con su padre.

Esto parecía un poco difícil, pues muchos teníamos, y aún tienen, la idea de que Dios es un ser lejano, absolutamente inaccesible, que está permanentemente airado con nosotros, al que su único deleite es castigar a la criatura que él mismo creó. Por eso, creo yo, que los discípulos no entendían cómo Jesús pasaba tanto tiempo orando, y no sólo el tiempo, sino también el lugar. Jesús no oraba sólamente cuando llegaba al Templo o en la sinagoga, El aprovechaba cuanto tiempo tenía libre para orar, y esto a sus allegados los tenía asombrados. En primer lugar, porque la oración era asociada con el pecado, y ellos veían el caminar diario del Maestro, y en segundo lugar, porque los milagros mas asombrosos vinieron desapués de grandes períodos de oración. ¿Qué había en la oración que Jesús la buscaba tanto? En la oración había comunión con su Padre, era su vía de comunicación con el cielo, era su descanso, era donde se renovaban sus fuerzas; la oración era, para Jesús, como estar en el cielo, era donde no se sentía solo, era estar con Dios.

¿Qué es la oración para nosotros? ¿Es un mero repetir, o una absoluta pérdida de tiempo? ¿ Es un momento que disfrutamos o que no vemos la hora que termine?

Que en nosotros tambíen haya ese deseo de orar, de pasar un tiempo con nuestro Padre, que sea un momento de gozo y fortaleza, como lo era para Jesús. Bendiciones.

miércoles, 16 de junio de 2010

Pan diario:PROVERBIOS 15:28


El corazón del justo piensa para responder,

mas la boca de los impíos derrama malas

cosas.


¡Las palabras! Cuánto bien podemos hacer con ellas, cuando las usamos para construir, para animar, para fortalecer. Una palabra bien dicha en el momento justo puede alegrar un corazón acongojado, puede dar consuelo al que no lo encuentra, puede reconfortar, siendo medicina para el alma, pues el que es justo mide con prudencia sus palabras y, aunque dicen que la verdad es cruda, no por eso debemos herir con ella.

Cuántos de nosotros alguna vez, cuando esperábamos una palabra de aprobación, recibimos palabras como golpes de espada, que terminan derribando nuestro ánimo y despedazando nuestro corazón, ¿Cómo reponerse ante semejante situación? Es una pregunta difícil de responder, pero debemos buscar consuelo en la palabra de Dios. Dice el salmista:"Abatida hasta el polvo está mi alma, vivifícame según tu palabra"(salmo 119:25)

A veces, no podemos evitar lo que nos llega; lo importante, ante Dios, es lo que hacemos nosotros, cómo actuamos ante una situación, porque, en último caso, de ésto nos van a pedir cuentas. Que el Señor nos ayude a ser "tardos para hablar y tardos para airarnos" y que cuando vengan a nosotros encuentren siempre una buena palabra, que sea del fruto abundante y bueno de nuestro corazón.

martes, 15 de junio de 2010

Pan diario: SALMO 146:3-5


No confíes en los príncipes,ni en hijo de hombre,

porque no hay en él salvación.

Pues sale su aliento, y vuelve a la tierra,

En ese mismo día perecen sus pensamientos.

Bienaventurado aquel cuyo ayudador

es el Dios de Jacob.

Cuya esperanza está en Jehová su Dios.


Los seres humanos somos muy propensos a confiar en otra persona, la cual consideramos que está en mejor posición que la nuestra, para recibir algún beneficio; esto ha sido así desde siempre. Confiamos que con la asunción de un gobierno o de una autoridad nos va a ir mejor y ciframos nuestra esperanza en un hombre, el cual perece, y nuestras ilusiones se disipan cual humo.

Por eso, Dios nos insta a que aprendamos a confiar en El solamente, porque El es quien hizo todas las cosas, en los cielos, en la tierra. A veces es mas fácil y somos mas dados a creer en lo que vemos, en lo que podemos percibir efectivamente, pero esto no es fe. Confiar en el Señor es creer aunque no veamos nada, pero debemos estar apoyados en su palabra siempre. Si Dios lo dijo, El no es hombre para mentir, y podemos estar absolutamente seguros de que, a su tiempo, Dios cumplirá lo que nos prometió.

Pero para confiar en Dios, hay que conocerlo, para confiar en El, hay que entablar una relación, y esto sólo es posible a través de Jesucristo. El es el único mediador entre nosotros y Dios, no hay mas, no tenemos necesidad de buscar en otro una ayuda, ¡qué mejor que poder hablar con el Hijo del Dueño de la vida! no podemos desaprovechar la oportunidad inmejorable que se nos brinda a través de Jesucristo. El te espera con los brazos abiertos, cree en El y tu vida cambiará para siempre.



lunes, 14 de junio de 2010


Los que siguen vanidades ilusorias,

su misericordia abandonan.

Jonás 2:8

El hombre piensa siempre de sí con una actitud positiva, con cierto dejo de omnipotencia,pretendiendo ejecutar las cosas sin la ayuda de nadie, porque considerarse incapaz o limitado en alguna situación es un signo de debilidad que lo deja en una posición de vulnerabilidad intolerable. Pero olvidamos, todos nosotros, nuestra condición de criaturas, despojados de toda poder para cambiar o torcer nuestra situación. Miremos a Jonás huyendo de Dios y creyendo que podía escapar de realizar la voluntad de Dios; veámosle desafiando la orden de Dios y partiendo tras su propio pensamiento, tras su propia ilusión.¡Tan vana la ilusión de pretender huir de la presencia de Dios y de sus designios para nuestras vidas! Pero Jonás se encuentra en una situación poco agradable, y hasta impensable, si se quiere, casi, casi en la sepultura y desde allí no le queda mas que pedirle al Dios que había despreciado que lo saque de ese lugar, que tuviera compasión de él.

Si nos creemos todopoderosos, personas absolutamente dueñas de nuestra vida y queriéndo hacer de ella lo que nos plazca, pensemos que nos colocamos en un lugar mas cercano a la ira de Dios y que, tarde o temprano, nos guste o no nos guste, humillados hasta el polvo y al borde de la desesperación, clamaremos a la misericordia de nuestro Dios y él extenderá su mano y nos salvará.

Vivir dependiendo de la misericordia de Dios no es una vida de pobreza espiritual, es otrogarle a nuestro Dios el control de todo cuanto nos pase, porque aunque seamos sus hijos, la justicia que nos dejó libres de culpa y cargo no es la nuestra, sino la de Jesús.

domingo, 13 de junio de 2010


¿Porque callas, Señor, y no respondes?

cuando al cielo miro buscando respuesta a mi clamor,

y el silencio me lastima con su calma solitaria,

y las luces parecen disiparse,

creo que sola estoy.

Todo parece oscuro, casi se me enfría el alma,

espero, sí, y desespero,

y parece que el tiempo no pasa.

Voces lúgubres avanzan sobre mí,

y cual saetas me atraviesan sin piedad,

¿Dónde está tu Dios? ¿Dónde está?

Señor, responde, Señor,

en Ti me he refugiado,

las aguas del desaliento casi tocan mis pies

y ahogan la esperanza;

Pero aquí estoy, esperando,

esperando tu respuesta que se ha demorado;

pero no tengo miedo, ya no,

porque en tu promesa he confiado.

Sola no estaré nunca,

y, aunque calles,

siempre estarás a mi lado;

Aferrada estoy a la Roca,

esperando y confiando,

ya la respuesta llegará y como bálsamo sanará,

yo lo sé...por eso aquí...

sigo esperando.

RONI

sábado, 12 de junio de 2010

ENSEÑANZA SEMANAL: Efesios 6:4

Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en la disciplina y amonestación del Señor.
Efesios 6:4
Este versículo, junto con el de Colosenses 3:21,es generalmente esgrimido por nuestros hijos, después de hallarlo en la Escritura, pero solo la primera parte, la de no provoquéis a ira, pero el verso contiene una segunda parte que nos habla de 2 palabras bastante poco usada en nuestras iglesias hoy en día:Disciplina y amonestación.
Generalmente, creemos que la disciplina es el equivalente a golpe, o a agresión física, pero dentro del enfoque bíblico, la palabra se refiere a molde, a amoldar. Criar en la disciplina del Señor es, por consiguiente, educar a nuestros hijos según los parámetros de la Palabra de Dios; y esto no es una tarea fácil ( ¡vaya que no la es!) porque el mundo de nuestros tiempos actuales le presenta a nuestros niños y adolescentes muchos modelos a seguir, muchos "moldes" a que amoldarse, y es deber de los padres preocuparse en qué molde o moldelo están siendo formados los hijos.
En cuanto a la siguiente palabra, amonestación, parece que implicara un reto, un llamado de atención después de ocurridos los hechos, pero sin embargo, es todo lo contrario, cuando la Biblia habla de amonestar está diciendo hablar ANTES que los hechos ocurran, es mostrar el camino que se debe tomar ANTES que se equivoquen de camino. Por supuesto, y como la palabra anteriomente mencionada, es una tarea que demanda responsabilidad y constancia.
Criar hijos no es tarea fácil, pero que el Señor nos ayude y nos de la capacidad para poder hacerlo:
Así que, hermanos míos amados,
estad firmes y constantes,
creciendo en la obra del Señor siempre,
sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano
1 Corintios 15:58
Bendiciones
RONI

viernes, 11 de junio de 2010

Pan diario: ROMANOS 12:19



No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor.


Ha sido tildado de dulce tomar venganza ante un agravio, retribuir de acuerdo al daño recibido, esto es visto como hacer justicia e intenta calmar el dolor que se siente ante lo que nos han hecho. Parece que vamos juntando amargura en nuestro corazón, esperando el momento justo para ejecutar la tan ansiada venganza.

Pero Dios nos dice que nos corramos de la situación y le dejemos el lugar a El, que El va a hacer justicia, ¡cuán difícil es entregar nuestra venganza en manos de Dios! Nosotros queremos hacerlo, porque parece que nos vamos a sentir mejor, satisfechos, pero después nos damos cuenta que no nos sentimos mejor, todo lo contrario, nos sentimos peor que antes. Por esto, cuando nuestra pasión esté en auge y la corriente sea fuerte, dejémosla pasar, no sea que sea enfurecida mas aún contra nosotros.

Seamos sabios, y permitámosle a Dios tomar parte en el asunto, El tomará nuestro lugar en la pelea y también curará nuestro corazón con su paz eterna.