sábado, 5 de junio de 2010

Pan diario: ROMANOS 5:8


Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.

Romanos 5:8

¿Qué padre entregaría a su propio hijo por salvar la vida de un malhechor? Creo que lo pensaríamos bien, es mas, ni lo pensaríamos siquiera; ninguno de nosotros haría semejante trueque, la vida de un delincuente o de un criminal, por la vida de nuestro único hijo ¿no es cierto?

Pero hay Uno que sí lo hizo, Uno que ofreció la inocente vida de su unigénito en pago por el alma del que no merecía misericordia, y no solamente de uno, sino de todos. Dios entregó a su Hijo para que nosotros pudiéramos tener vida, pudiéramos ser salvos; para que Dios nos perdonara por habernos alejado de Él nos abrió un camino que no fue fácil, fue de extremo dolor, pero que Cristo soportó por amor a todos nosotros. Este es el amor de Dios, amor de Padre, amor eterno.

Su amor está para ti hoy, no lo desprecies.