sábado, 23 de octubre de 2010

Enseñanza Semanal:LAS MARCAS DEL CREYENTE 1 Tes. 1:2-3




Damos siempre gracias a Dios por todos vosotros, haciendo memoria de vosotros en nuestras oraciones,
acordándonos sin cesar delante del Dios y Padre nuestro de la obra de vuestra fe, del trabajo de vuestro amor y de vuestra constancia en la esperanza en nuestro Señor Jesucristo

Todos tenemos rasgos de carácter que nos definen ante los demás, ya sea porque hablamos mucho o poco, si somos mas intelegentes o menos, en fin, siempre hay algo que nos destaca y nos resume en pocas palabras.
Hay virtudes que son buenas y que nos gustaría tener, y hay otras que nos avergonzarían, pero a un verdadero creyente hay 3 marcas que lo caracterizan como tal y los distinguen del resto de las personas.
Los tesaloniscenses recibieron el evangelio en medio de gran tribulaición, o sea que no tuvieron mucho tiempo para prepararse en el servicio. El evangelio les fue predicado con la persecución pisándoles los talones, sin embargo, lo poco  que sabían fue notorio en todos lados:

I   LA OBRA DE LA FE:
  • El Señor es el objeto de mi fe, no creo en otra cosa, creo en El; y si yo confío en Cristo, obro en fe, ¿qué significa?
  1. una convicción firme en Dios
  2. una rendición personal a El
  3. un conducta inspirada en esa rendición.
  • Dónde encuentro su voluntad: en su Palabra. ¿Como obro en fe? Cumpliendo sus mandamientos. Ejemplo: Proverbios 3:27
II   EL TRABAJO DE AMOR:
  • La palabra "trabajo" indica sufrimiento y esfuerzo. Pablo habla de un trabajo que nos va a demandar esfuerzo, fatiga y, a veces, dolor. Cuántas veces no dijimos: BASTA, no doy mas, pero el Señor renueva nuestras fuerzas y seguimos adelante vez tras vez.
III   LA CONSTANCIA EN LA ESPERANZA:
  • Habla de permanecer en una posición ¿cuál es? La esperanza de la venida del Señor, el creyente camina en esa esperanza de que por su fe en Cristo va ha ser librado de la ira venidera.
Notemos a través de los versículos 9-10 cómo los tesaloniscenses mostraban sus marcas o estas tres evidencias de salvación, no solo al apóstol Pablo sino también al mundo entero: La obra de la fe ( "se convirtieron de los ídolos a Dios"); el trabajo de amor ("servían al Dios vivo") y la constancia de la esperanza ("esperaban el regreso de Cristo).  La fe, la esperanza y el amor son la evidencia de la verdadera salvación.
Bendiciones