jueves, 14 de octubre de 2010

Pan Diario: Juan 17:3


Esta es la vida eterna: que te conozcan a Ti, el único Dios verdadero y a Jesucristo, a quien has enviado


La vida eterna. ¿Cuánta conciencia tenemos de ella? A veces, la vemos como algo absolutamente lejano, con una idea de amplitud atemporal, si cabe el concepto; quizás algo donde depositamos nuestra esperanza, pero siempre futuro.

Es difícil que consideremos la eternidad en el presente, o como parte de él. Pero el Apóstol Pablo, aunque presenta la vida eterna mas en su aspecto de esperanza puesta delante del creyente, sin embargo, muestra que ésta tiene un efecto moral en el (Tito 1:2 y 3:7)

Tenemos vida eterna desde el momento en que creímos, es un privilegio del que gozamos desde que somos salvos por Cristo "¡Oh, si los creyentes pudieran llegar a ser de veras concientes de lo que significa la Eternidad! Si supiéramos vivir cada momento de cada día bajo la mirada de Dios; si cada acto lo realizáramos a la luz del juicio que ha de recaer sobre nuestras acciones; si vendieramos cada artículo, eleváramos cada una de nuestras oraciones, diezmáramos hasta la última de nuestras posesiones, predicáramos ( los que somos predicadores)cada uno de nuestros sermones con un ojo a la humanidad condenada y con el otro al tribunal de Dios, entonces tendríamos un despertamiento del Espíritu Santo que conmovería la tierra y en muy poco salvaríamos a millones de preciosas almas"(Por qué no llega el avivamiento, L Ravenhill, cap. 5)

Dios nos ha dado vida eterna dándonos muestras de ello al enviarnos su Espíritu Santo como "arras de nuestra herencia", una porción o muestra de lo que nos espera, vivamos la plenitud del Espíritu hoy.
Bendiciones