miércoles, 28 de abril de 2010





Los cielos cuentan la gloria de Dios, y el firmamento anuncia la obra de sus manos.

Un día emite palabra a otro día, y una noche a otra noche declara sabiduría.

No hay lenguaje, ni palabras, ni es oída su voz

Por toda la tierra salió su voz

Y hasta el extremo del mundo sus palabras

Salmo 19:1-4

¡Cuán hermosas son tus obras, Señor! Y cuánto dice de Tí tu creación, cómo podemos ver tu maravilla; a veces el hombre ve todo en la gama del gris, pero Tu nos has regalado un mundo de colores; a veces agachamos la cabeza y solo miramos hacia abajo, hacia nosotros, pero Tu nos invitas a levantar nuestra vista al cielo y maravillarnos de Tí. Señor, que en este día que comienza nos demos el permiso de asombrarnos aún en la pequeña flor del jardín, que nos regala sus colores, que podamos darte gracias por permitirnos vivir en tu mundo.